El Scelidosaurus, al igual que sus sucesores, tenía su cuerpo cubierto de placas óseas para defenderse de los ataques de grandes depredadores de su tiempo como el Magnosaurus. Esta característica evidentemente hacia que este animal fuese de movimientos lentos y hasta torpes, y encima, además de las placas, su piel estaba formada por escamas óseas hexagonales, lo que lo dejaba más blindado y con más peso.
A pesar de que el Scelidosaurus se moviera lentamente, al menos podría andar a dos patas, capacidad de la que no gozarían ninguno de sus sucesores (bueno, tal vez algún estegosaurio sí), y que le era posible gracias a lo fuertes que tenía las extremidades traseras, mucho más largas que las delanteras. Al ponerse a dos patas, este tireóforo primitivo se podría haber alimentado de vegetación a un par de metros de altura. Tenía un cráneo pequeño, que estaba dotado de dientes en forma de hoja, característica muy común entre los herbívoros.
3 comentarios:
Que raro que pese tan poco ¿no?
Buen aporte amigo.
Un detalle, se te olvido poner nombre al post :)
Sí, parece que sus primitivas placas no le acaerraban mucho peso, ten en cuenta que un terópodo de 4m no debería de pesar mucho más, lo que pasa es que los anquilosaurios fueron excesivamente pesados.
Ups!!Cierto!
Muy buena página de información. Me gustaría contribuir al conocimiento de estos seres fascinantes con el blog de dinosaurios que he creado después de compartir con mi hijo la afición por estos seres. Felicidades por tu página. Te dejo mi dirección del blog por si me quieres poner un enlace: http://mundo-dino.blogspot.com
Publicar un comentario